Jorge Solana Aguado | Director Calatrava 360 ||
Nos enfrentamos a uno de los momentos más inciertos de la historia que nos ha tocado vivir. La pandemia del Covid-19 ha relativizado muchas de las cosas que creíamos imprescindibles y ha subido en la escala de valores muchas otras que asumíamos como comunes.

En marzo, ayer se cumplían 6 meses de ese día en que nos trasladaron que pasaríamos por el Estado de Alarma y el confinamiento, la situación la desconocíamos. Ahora, por mucho que la conozcamos, no sabemos todavía a cuanta gente afectará en esta nueva ola.

Ante una situación de incertidumbre personal, social y mundial nuestra labor personal debe ser la de mantener todo el cuidado posible para nosotros mismos. El mayor de los respetos con los que nos rodean, ya sean familiares, amigos, conocidos o simplemente de los vecinos que nos cruzamos por la calle. Y mucha empatía, mucho reconocimiento hacia lo que está haciendo el otro. Agradecimiento por el esfuerzo de cumplir con todas las normas que nos han establecido como necesarias.

En Campo de Calatrava se ha disparado el nivel de contagios en algunos municipios y parece, por desgracia, que la escalada sigue. Los municipios, a través de las ordenanzas de sus alcaldes, se confinan. Debemos ser cuidadosos con nuestros ciudadanos y si es necesario aplicar estos confinamientos.

A la vez tenemos que ser conscientes de la situación económica que viven muchas familias del entorno ya en estos momentos. Señalan los expertos que será mucho peor, que aún vendrán tiempos de mayor crisis. Es el momento de hacer el esfuerzo. Debemos de comprometernos con el comercio de proximidad. Incluso me atrevería a decir con las tiendas de pueblo o los mercadillos. Todo aquello que reporte y haga girar la economía y el dinero en la zona. Los grandes supermercados son imprescindibles para hacer la compra de productos de gran consumo, pero hay toda una serie de alimentos que los tenemos a mano y los vende el vecino. Esto pasa con todos los sectores.

Por otra lado, no podemos dejar de promocionar un lugar, Campo de Calatrava. Tan cerca de Madrid. Una reserva de lugares en los que la naturaleza y la historia pueden ofrecer lo que todo el mundo desea ahora. Un poco de paz, un poco de tranquilidad y un mucho de poder pasear en zonas donde no juntarse con mucha gente. Si vienen de Madrid o de otros sitios, habrá que extremar las medidas de seguridad sanitaria. A la vez, hay que entender que el turismo es parte de la dinamización económica de la zona.

En fin, cuidado, respeto y mucha empatía. Conceptos y recetas para este otoño que se nos avecina.